De Joaquín Suárez los uruguayos conocemos su abnegación y patriotismo, por aquella vieja frase de que “a la madre no se le llevan cuentas”, cuando se rehusó a recibir la devolución de las enormes sumas de su fortuna personal que había entregado a la Cruzada libertadora de 1825 y al gobierno de la Defensa de Montevideo. Sin embargo, la memoria historiográfica lo tiene un poco olvidado, desdibujándose su enorme figura. Este libro de Luis Hierro López busca suplir esa carencia, con una biografía que nos presenta a un personaje histórico que ha quedado relegado, y cuya personalidad tiene mucho que ver con los cimientos de nuestra identidad como país.