La idea de que la lectura puede contribuir al bienestar es muy antigua y ha sido tan documentada, como la opuesta que la lectura es dañina. Pero pocas obras hablan de la naturaleza de los procesos que llevan a la reconstrucción de uno mismo a partir del encuentro con la palabra escrita. Esta obra es un esclarecedor ensayo sobre el poder de la lectura para desencadenar una reorganización de lo posible, aun en los contextos más difíciles.