Una vida sagrada y profana Michelangelo Merisi da Caravaggio vivió la más oscura y peligrosa vida de entre los grandes maestros de la pintura. Los ambientes de Milán, Roma y Nápoles en los que Caravaggio se movió, y que Andrew Graham-Dixon describe magníficamente en este libro, son los de los cardenales y las prostitutas, los de la oración y la violencia. En las calles que circundaban iglesias y palacios, las peleas y los duelos eran moneda común. En una de estas disputas, el impetuoso Caravaggio mató a otro hombre y tuvo que huir a Nápoles y luego a Malta, donde escapó de prisión tras verse envuelto en otro episodio violento. Él mismo fue víctima de un intento de asesinato en Nápoles tiempo después. Murió mientras regresaba a Roma en busca del perdón papal para sus crímenes. Tenía 38 años. Andrew Graham-Dixon ha pasado una década reuniendo las evidencias conservadas sobre la vida de Caravaggio para responder en este libro a muchas de las cuestiones que durante años han desconcertado a los investigadores. Revela las identidades de la gente corriente -a menudo prostitutas y mendigos- que el pintor usó como modelos para sus representaciones de escenas religiosas clásicas; describe lo que pasó realmente durante ese fatídico duelo; y ofrece el más convincente relato publicado hasta la fecha de las extraordinarias circunstancias de su muerte. Y en el centro de este relato se sitúa la reveladora interpretación que Graham-Dixon hace de los cuadros de Caravaggio para mostrar cómo éste creaba su drama, inmediatez y humanidad, y cómo rompió drásticamente con las convenciones de la época.