Tucídides es el creador de un tipo absolutamente nuevo de literatura histórica. Su estilo revela las características propias de una historiografía moderna: afán de verdad con sus correlatos de objetividad, imparcialidad y precisión, búsqueda de lo general en lo individual, despreocupación por aspectos marginales que hasta entonces habían sido prioritarios para sus antecesores, utilización de un lenguaje especializado y técnico capaz de expresar la abstracción y la adopción de una cronología.